LA BODEGA

Bodega Doña Felisa es una bodega familiar que data del año 2000, a partir de esta fecha es cuando experimenta un ascenso en comercialización y se empieza a gestar lo que es hoy en día una de las bodegas punteras de Andalucía de vinos tintos.

Su elaboración está basada en una cuidada y limitada producción en el viñedo, trasmitiendo al vino la expresión del “Terroir” donde se encuentra.

Bodega Doña Felisa está enclavada en un lugar para disfrutar de turismo enológico, ya que se encuentra en las proximidades de la Ciudad Romana de Acinipo.

En esta bodega Andaluza los vinos se producen mediante un proceso controlado que comienza en el cuidado del viñedo, y posteriormente la obtención del vino, ofreciendo a sus clientes un producto de óptima calidad, con una gran carga conceptual y un diseño exclusivo.

El paraje denominado “Chinchilla“, donde se ubica esta bodega era famoso ya tiempos de asentamientos Romanos por sus viñas y vinos, que se enviaban a Roma desde la costa de Málaga.

La bodega Andaluza fundada por José María Losantos que actualmente dirige la gerencia de esta, junto a su esposa Gema Alonso comienza unos años de expansión territorial.

Partiendo de la filosofía de que un buen vino se hace en la viña, el paraje denominado “Chinchilla” donde se ubica la bodega, era famoso en el pasado por sus vinos y viñas.

Su terreno es franco-arenoso, de fácil drenaje y las variedades elegidas en función del Terrior fueron Tempranillo,Cabernet Sauvignon, Merlot y Syrah.

La variedad de tempranillo utilizada (Clon 51) tiene una particularidad, al ser la baya de menor tamaño de lo normal, consiguiendo que la relación pulpa y hollejo sea más adecuada para extraer el máximo de color, y otros elementos fundamentales para la obtención de un gran vino de calidad.

La viticultura se desarrolla con un marco de plantación de dos por uno (número de plantas colocadas en línea, separadas un metro una de otra, y dos metros de separación una línea de otra). El resultado son cinco mil plantas por hectárea.